Este sábado volví a ver la película de Roberto Benigni “La vida es bella”, esta vez con mis hijas. ¡Qué maravillosa y profunda película! ¡Qué lección magistral y qué aprendizaje para mis hijas, que disfrutaron, rieron…y también lloraron! ¡Y qué aprendizaje para mí, que cada vez que la veo me emociono y extraigo energía para intentar imitar, aunque sea en un 1%, al protagonista de la película.
Benigni logró una obra de arte con este filme, y podemos aprender muchas lecciones de él. La primera, nuestra capacidad para hacer de nuestra vida una obra maestra, igual que un pintor o un escultor. Y contribuir a que también lo sea para los demás.
Y eso, independientemente de lo que suceda en nuestra vida. Si maravillosa y mágica es la primera parte, donde el protagonista desarrolla toda su creatividad e imaginación para conquistar a la mujer de la que se ha enamorado, igual de emocionante es la segunda parte, donde el padre tiene que gestionar el brusco cambio que sufre su vida y la de su familia, como consecuencia de ser recluidos en un campo de concentración nazi.
Todos deberíamos aprender a ver la magia implícita en cada momento de la vida. Todos deberíamos aprender a enfocarnos en lo positivo, incluso en los momentos más dramáticos y crueles, y todos deberíamos crear un poquito de magia a nuestro alrededor, en lugar de tanto negativismo y resentimiento.
Viendo la película podríamos concluir que la vida no sólo es bella, sino también atroz y trágica. Sin embargo, contando con esta inevitable dualidad, lo más importante es que nosotros debemos hacer bella la vida con nuestra actitud y con nuestro comportamiento, basado en la fe inquebrantable en los valores universales que defiende la película: amor, honestidad, coraje, generosidad, pasión, belleza e imaginación.
Esta es una película que deberían ver, no una sino varias veces, todas las personas que se quejan a diario de su trabajo o de su vida. Deberían verla todos los directivos que dirigen equipos y quieren mantener su ilusión, debería ser de visión obligatoria en los cursos en empresas sobre Gestión del cambio y Motivación.
No creo que tarde mucho tiempo en volver a verla, porque aún me parece que esconde secretos profundos sobre el alma humana. ¡Y yo tengo tanto que aprender!
JAVIER CARRIL. Coach. Visita mi web: http://www.zencoaching.es/
Autor de los libros DesESTRÉSate, Ed. Alienta, 2010…y Zen Coaching, un nuevo método para potenciar tu vida profesional y personal, ed. Díaz de Santos, 2008.
Es curioso, yo estuve viendo un documental de la 2 sobre el holocausto con imágenes reales y fue realmente escalofriante, pero sin duda, a pesar del horror, ver en todo el lado positivo es lo mejor para nosotros mismos y para los demás, aun en las situaciones más difíciles.
Todavía estaba un poco conmocionada por ese documental pero el post me ha animado un poco.
Por cierto, enhorabuena por el libro «Desestrésate», es la tercera vez que lo releo y me encanta y me ha ayudado mucho en mi vida diaria.
Saludos,
Encarna