¿Quieres tener éxito o ser feliz?

¿Se puede ser feliz sin tener éxito? ¿Se puede tener éxito y aún así, no ser feliz? El éxito nos da muchos quebraderos de cabeza, nos confunde con sus cantos de sirena, nos hace cometer toda clase de estupideces, nos lleva en muchas ocasiones a olvidar nuestros valores y principios. Yo nunca hablo de éxito con mis clientes de coaching. Hablo con ellos de lo que les ilusiona, de lo que quieren para su vida. El éxito es una palabra vacía.

Entonces ¿Por qué queremos tener éxito? ¿Qué significa el éxito? Habitualmente, se identifica en nuestra sociedad con alguien que ha logrado un nivel social, profesional o económico muy por encima de la media. El éxito suele ir acompañado de conceptos como competitividad, agresividad o el logro de nuestros objetivos.

¿Y qué pasa con nuestra felicidad? ¿Acaso el logro de nuestros objetivos nos lleva siempre hacia la felicidad? Evidentemente no. Muchas veces sucede lo contrario, nos alejan de nuestra verdadera esencia. Pero en muchas ocasiones somos seres débiles, que dependemos demasiado de la aceptación de los demás. Si los demás nos aplauden cuando logramos un objetivo, nos sentimos aceptados y entonces creemos que ése es el único camino.

Esta obsesión con el éxito, por eso, tiene mucho que ver con profundas carencias emocionales. Como no estamos interiormente bien con nosotros mismos, tratamos de cubrir esa necesidad de estar bien de forma externa y superficial, trabajando 12 horas diarias, tratando de ascender en nuestra carrera profesional como sea, o ganando más dinero del que necesitamos. Esa escalada lleva muchas veces a destruir nuestra vida personal y familiar. No es de extrañar que en la sociedad del superbienestar, la depresión y el estrés estén aumentando a niveles alarmantes. Y seguirán creciendo.

¿Y eso es el éxito? Paradójicamente, lo que nos está pasando es que, por un excesivo enfoque en el éxito individual y egoista, terminamos convirtiéndonos en auténticos fracasados.

Un fracasado es una persona que ha destruido su vida personal, aunque haya conseguido todas sus metas.

Un fracasado es una persona que se acomoda y resigna a una situación profesional o personal insatisfactoria.

Un fracasado es alguien que actúa o vive en contra de sus valores.

Un fracasado es alguien que no es feliz, como mínimo, el 80% del tiempo que pasa en su trabajo.

Un fracasado es alguien que no es feliz, como mínimo, el 80% del tiempo de su vida personal, con su pareja o familia.

Esto no quiere decir que conseguir objetivos sea negativo. Al contrario. Lograr nuestras metas nos hace crecer y superar nuestros límites, nos produce satisfacción y confianza. Ahora bien, ¿De quién son esas metas? ¿Estamos seguros de que son realmente nuestras, o son objetivos que hemos adoptado de la sociedad, de nuestros padres, o de otras personas? ¿Son metas acordes con nuestros valores y forma de ver la vida? ¿Son nuestras metas?

No cometas el error de dejarte llevar por las reglas sociales, por el status, por la titulitis, por la necesidad de aceptación de los demás. Mira dentro de ti y decide verdaderamente lo que quieres, aunque la sociedad o las personas cercanas no lo etiqueten como éxito.

Muchas personas tienen éxito en la vida, pero son unos fracasados en su vida. Muchos tienen éxito en la forma, pero no en el fondo.

Preocúpate únicamente de tener éxito en tu vida. Sólo lo habrás conseguido si eres feliz con lo que eres, con lo que haces y con lo que tienes.

JAVIER CARRIL. Coach. Visita mi web: http://www.zencoaching.es/
¿Has comprado ya mi libro «Zen Coaching. Un nuevo método para potenciar tu vida profesional y personal», ed. Díaz de Santos, 2008?

9 Comentarios

  1. fina

    Hace tiempo que me divorcié del estres laboral y de complir un montón de horas. Es importante ver que tu vida profesional se va realizando y consigues superarte y ser mejor profesional, pero afortunadamente disponer de tiempo libre para no hacer nada y estar contigo mismo o con las personas a las que quieres, disfrutar de sentir y compartir es lo mejor de la vida.

    Responder
  2. Anonymous

    hola Javier todo esto está muy bien, pero que ocurre cuando eres feliz con tu pareja y en tu familia pero como mujer sientes que has buscado la felicidad en tu familia y ahora no puedes tener hijos y notas que profesionalmente no estas donde te gustaría estar, pero no tienes claro que quieres y como alcanzarlo. Te planteas toda tu vida de nuevo y no encuentras respuestas.

    Responder
  3. JAVIER.CARRIL

    Se dice que buscamos respuestas y lo que recibimos son preguntas. Pero las crisis, y te lo digo por experiencia, son un momento tremendamente productivo, son la oportunidad para rebelarnos ante lo que no nos gusta de nuestra vida, y nos dan el empuje para cambiar lo que sea necesario. Así que te diría que te lo plantees con esta perspectiva. Aunque evidentemente es doloroso, merece la pena, porque eso significa que estás viva.

    Responder
  4. Isabel

    Este post me ha gustado mucho. Es una cuestión tan central en nuestra vida! Para mí el éxito personal y vital es vivir la vida que realmente quieres. Ese es el quid de la cuestión, como muy bien apuntas. Para vivir la vida así, necesito dedicarle tiempo a pensar qué es lo que realmente quiero por encima de cualquier otra cosa. Y es una pregunta que me obligará a verme a mí misma. Si soy capaz de hacerlo sin prejuicios, sin miedos ni parálisis, con energía… Entonces encontraré mi meta. Pero tener clara la meta, tener el foco, no basta. Hay que plantearse una estrategia y tomar acción. Este es, sin duda, un tema también muy importante que ya has comentado en alguna otra ocasión.
    Un abrazo,
    Isabel

    Responder
  5. Maria

    lo puedes decir mas alto, pero no mas claro
    felicidades por este post!

    Responder
  6. Anonymous

    Yo me he dado cuenta que lo que realmente quiero es tener mi carrera, es lo que siempre soñé, claro que nunca me imaginé que sería así.
    Resulta que me enamoré realmente de él (de mi sueño), y ahora sigo tras él, cada vez siento que llegaré como quería llegar, y los mojigatos esos ahí se quedan…

    Besitos
    Nos vemos el Domingo, recuerda.

    Elvira

    Responder
  7. Beatriz Vilas

    Me ha gustado mucho post y estoy convencida de que a veces el éxito en lo social ó profesional nos lleva exclusivamente a encontrarnos peor con nosotros mismos.
    El éxito, tal vez, sea encontrar el equilibrio entre todas las facetas de nuestras vidas y en eso, estoy convencida, nuestro trabajo como coach es fundamental.
    Te felicito por tu buen trabajo Javier.
    Un abrazo

    Responder
  8. Irene

    Hace un par de meses me encontré con este blog por casualidad y me gustó lo que leí, pero hoy quiero felicitarte, porque creo que has dado en la diana. Lo que has escrito me parece importante y además totalmente cierto. Hoy mismo le decía a una compañera de trabajo que me daba pena que nunca tengamos tiempo de disfrutar de las cosas. Hemos trabajado duro en un proyecto que ha salido muy bien y sin embargo antes de llegar a la mesa del despacho, el móvil ya sonaba y sonaba y se me acumulaban un montón de tareas que seguir haciendo.

    Creo que es una pena que vivamos muchas veces sumergidos en una vorágine de estrés y de histerismo colectivo; una pena que no aprendamos a parar un minuto a respirar y a plantearnos el porqué hacemos las cosas.

    Sin embargo, a pesar de la locura que a veces me envuelve en mi vida diaria, y aunque no siempre puedo elegir, también creo que está en nosotros la oportunidad para cambiar el chip, para mejorar con nuestra actitud o por lo menos para ser autocríticos y cuestionarnos todas estas cosas. Está en nosotros la oportunidad de buscar algún oasis en la realidad para ser un poco más consecuentes con nosotros mismos, con lo que queremos, con lo que nos merecemos.

    Este ha sido un año bastante duro en lo personal, pero las cosas que me han hecho más daño han sido las que también me van enseñanando a conocerme mejor, a ser más fuerte.

    Para mi la felicidad está en conseguir pequeñas metas, en valorar lo que tengo y también lo que puedo perder y aprender a disfrutar de lo bueno. Creo que el éxito está en tratar de ser mejor persona también, y en conseguir pasar página de todo aquello que un día me hizo sufrir y me hizo perder el tiempo, la ilusión y mi energía. No siempre es fácil, pero por lo menos quiero intentarlo. Después de la parrafada q me ha salido, de nuevo ENHORABUENA y GRACIAS por mandar desde algún lugar de la red mensajes de confianza y esperanza. GRACIAS por dedicar un tiempo en dar algo bueno a los demás…

    Responder
  9. Maria

    hola..me he encontrado con este blog por pura casualidad porque andaba buscando algun aliciente u opinion sincera..la cuestion es que han pasado años en una situacion en el cual he buscado un empleo relacionado a mi area y lo he encontrado y me estoy empezando a sentir realizada pero al mismo tiempo me siento presionada por personas y sobre todo mujeres con respecto a la maternidad..tengo 32 años..y claro deseo tener familia y la tendre..pero pareciera que se ve mal el hecho de querer tener algun aliciente profesional..porque ni siquiera lo llamo exito, y no tener hijos aun..y bueno siempre me invaden con frases tipicas..y bueno y tu cuando vas a tener hijos..que ya es tarde he?..y me molesta mucho..
    Me siento feliz como estoy mi esposo es el que quiero como hombre..pero aun no deseo ser madre? tan malo es?

    Responder

Dejar una respuesta a Anonymous Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Descarga Gratis

Descárgate gratis 2 cuentos de mi libro
«El hombre que se atrevió a soñar»

Mis Libros

Reconecta Contigo

7 Hábitos del Mindfulness para el éxito personal y profesional

El hombre que se atrevió a soñar

zen coaching

DesESTRÉSate